Brecha salarial: trabajar un 27% más para ganar lo mismo

Desde el 1 de enero de 2017 hasta el 9 de abril de 2018 es el lapso de tiempo que las mujeres tuvieron que trabajar para ganar lo mismo que un hombre ganó durante 2017.

Esto se debe a que, según un informe del Observatorio de Coyuntura Económica y Políticas Públicas (OCEPP) de julio de 2017 basado en datos del INDEC, los hombres perciben en promedio en Argentina un salario de $14.690 mensual y las mujeres $10.710, es decir, un 27% inferior.

¿Por qué existe una brecha salarial?

En primer lugar, porque la división sexual del trabajo asigna a las mujeres tareas que en el mercado están peor pagas. Los trabajos como el doméstico o de cuidados tienen una remuneración más baja que labores como la de chófer o cadete que están más asociadas al “mundo masculino”.

Por otro lado, el ingreso de las mujeres suele ser menor debido a que continúan teniendo a cargo las tareas del hogar y cuidado. Esto conduce a tener mayor tasa de empleo parcial y como resultado menos horas de trabajo remunerado que los hombres.

Otra de las causas es la discriminación sexista que existe en el mundo laboral, donde las mujeres muchas veces no son elegidas para trabajos de mayor responsabilidad y mejores pagos por ser posibles madres u otros prejuicios basados en el género.

Un proyecto para la igualdad salarial

Si bien la Constitución Nacional y otras legislaciones laborales garantizan la equidad de salarios entre hombres y mujeres, el macrismo presentó el 12 de marzo un proyecto para favorecer la igualdad salarial.

El texto, que busca modificar la Ley de Contrato de Trabajo, extiende las licencias por nacimiento o adopción a 15 (quince) días para el trabajador cualquiera sea su género, sosteniendo el régimen de licencia de 90 días para las mujeres gestantes. Si bien la extensión de 3 a 15 días de licencia es un avance, esta modificación sigue manteniendo el eje del cuidado de los hijos e hijas en la madre.

Otro de los puntos positivos del proyecto es la introducción de 10 días de licencia por violencia de género, previa presentación de una constancia de intervención de una autoridad sanitaria, administrativa o judicial.

Sin embargo, el proyecto de Ley no ataca la raíz de la desigualdad salarial que en la mayoría de los casos no se explica por el pago desigual de la misma tarea, sino por la distribución desigual de hombres y mujeres en las ramas de actividad, y las dificultades para romper el techo de cristal. Es en estos puntos es donde se hace urgente apuntar los cañones si se busca aportar a la igualdad salarial entre los géneros.

Asimismo, se hace necesario un aumento de las políticas públicas relacionadas con el cuidado de personas menores y ancianas. Implementar una red nacional de cuidados posibilita que las mujeres accedan al mercado de trabajo en mejores condiciones y en las más jóvenes que puedan estudiar.

Las mujeres, que son la mayoría de las llamados ni-ni (ni estudian, ni trabajan), cargan con las tareas de cuidado el doble de tiempo que su pares varones, por eso jardines maternales, centros de atención a las personas mayores gratuitos y transferencias para cuidar a las personas con capacidades diferentes, habilitarían un mayor acceso de las mujeres al trabajo y/o formación.

Este 9 de abril de 2018, “día del pago igualitario”, entre las 13hs y las 15hs mujeres economistas de todo el país realizarán un twittazo. El tema principal será la brecha salarial que se estima que ha crecido en el último trimestre de 2017. La iniciativa es impulsada por la organización Economía Femini(s)ta, que hace tiempo viene trabajando estos temas. Los hashtags utilizados serán #DíaDePagoIgualitario #QueremosGanarLoMismo y #RompamoslaBrechadeCristal.

Valeria Silva y Carolina Zanino, licenciadas en Economía (UBA)