Nacionales

26 noviembre, 2014

La presidenta volvió a hablar en público: Ganancias, buitres y oposición

En su reaparición tras el reposo que debió guardar por un cuadro de sigmoiditis y que la obligó a estar internada una semana, Cristina Fernández habló de diversos temas. El impuesto a las ganancias, los fondos buitre y los proyectos políticos de la oposición, estuvieron en el eje de su discurso.

En su reaparición tras el reposo que debió guardar por un cuadro de sigmoiditis y que la obligó a estar internada una semana, Cristina Fernández habló de diversos temas. El impuesto a las ganancias, los fondos buitre y los proyectos políticos de la oposición, estuvieron en el eje de su discurso.

Fue en el cierre de la convención de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC). Allí la mandataria sostuvo que cuando Néstor Kirchner era presidente y ella senadora, «se escuchaba concebir a la obra pública no como inversión sino como un gasto. Dimos vuelta este paradigma y ya no hay dirigente político que dude que la infraestructura es algo importante».

A partir de ese eje habló del sistema tributario donde remarcó que «no habría 136.000 viviendas en ejecución del plan Procrear si no se hubiera recuperado la administración de los recursos de los trabajadores» en 2008, con la nacionalización de las AFJP. De esta manera remarcó que esa estatitazión, junto con la de YPF y Aguas Argentinas (hoy AySA) fueron impulsadas por el kirchnerismo.

«Es muy importante la infraestructura, el problema es ver el financiamiento y qué hemos hecho cada uno de los sectores políticos para que esto se lleve a cabo», subrayó la presidenta y añadió que «la política debe dejar de ser un lugar de promesas para ser de coherencia entre lo que se dice y se hace».

En ese sentido se preguntó «¿cómo hacemos para financiar obra pública si no cobramos impuestos?», haciendo alusión al pedido de diversos sectores de que se baje o elimine el Impuesto a las Ganancias o los derechos de exportación. Solicitó entonces a los empresarios que cuando se encuentren con otros políticos, «en vez de preguntarle por el dólar o mi salud» les consulten «qué va a hacer y que lo explique con números contantes y sonantes».

Otro de los ejes del discurso fue la situación del frente externo y la negociación con los holdouts. «Nosotros tenemos mucho interés en solucionar el tema externo», dijo aunque remarcó que «es muy importante ponerse de acuerdo con todos, queremos llegar a un acuerdo con el 100% de manera legal, pero sin chantajes».

En ese punto aprovechó para responderle la presidente de la CAC, Gustavo Weiss quién había señalado que una «normalización» del frente externo iba a generar financiamiento internacional para obras. «El sistema financiero internacional no está muy dedicado a financiar obra de infraestructura. Sí los veo dispuestos a endeudar a los países. Porque su negocio está en que un país se endeude», expresó Cristina. «A esta presidenta ningún buitre ni ningún carancho judicial la va a extorsionar», disparó.

Asimismo, hizo referencia al funcionamiento de la compra y venta de dólares para tenencia, donde 1,5 millones de argentinos desde fines de enero a la fecha, pudieron concretar compras por un total de 2.480 millones de dólares.

La mandataria precisó que quienes ganan entre dos salarios mínimos y 23.000 pesos y trabajan en relación de dependencia representan el 25% de esos 2.400 millones de dólares, lo que «revela la capacidad de ahorro de los trabajadores argentinos, que siguen siendo los mejores remunerados de toda América Latina».

Así aprovechó para cuestionar nuevamente el pedido de modificación del impuesto a las ganancias por parte de diversos sindicatos. Los trabajadores tienen que «cuidar lo logrado» y «tener comprensión», sostuvo.

Finalmente apuntó contra los medios de comunicación y los «profetas del fracaso» por generar «estados de ánimo y expectativas». Cristina le pidió «al empresario y a todos los argentinos que antes que leer el diario, que se mire él su balance y el trabajador que vea su situación personal para ver si lo que dicen los diarios es cierto o no. Poco tiene que ver con la realidad, pero generan estados de ánimo».

«Espero que en diciembre no haya efemérides. Está todo armado, terminemos con esto, hay otras maneras más legítimas de hacer esto», concluyó.

 

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